Todas
las personas guardan algún secreto. Incluso Fernando, un modélico padre
de familia que se desvive por la felicidad de los suyos, o su mujer
Marta, de intachable conducta pública y una discreción sin límites.
También Antonio, amigo y socio de Fernando, oculta una verdad incómoda.
¿Y qué decir de Isabel, la mujer de ést
e
y mucho más joven que él? La resonancia de un disparo es la novela de
una confesión, con sus píldoras de intriga y sus dosis de veneno. Tras
el éxito de La judía más hermosa —con la que se adentró en el género
histórico— Fernando García Calderón retorna a la intriga psicológica con
un relato sutil como un mecanismo de relojería, pero que podría
estallar en manos del lector. Sí, todos guardamos algún secreto en el
fondo de nuestra conciencia, y basta una detonación para que afl ore a
la superfi cie. Tan sólo queda desear al lector que nada de lo que en
esta novela sucede le resulte sospechosamente familiar.